La relación entre Sylvia Pasquel y su madre, la icónica Silvia Pinal, estuvo marcada por momentos difíciles durante su infancia. Aunque ser hija de una figura tan prominente en el cine mexicano podría parecer una bendición, la realidad para Pasquel fue muy distinta, ya que creció bajo un ambiente familiar estricto y complicado. En una entrevista con Mara Patricia Castañeda en 2019, Sylvia reveló que su madre era extremadamente exigente y, en ocasiones, muy severa con ella. “Era una niña de lo más sumisa… me metía a la regadera con agua fría. Yo siempre estaba castigada”, confesó Pasquel.
A pesar de estos castigos, Sylvia encontró maneras de canalizar su creatividad durante los períodos de reclusión en su habitación. “Dibujaba, pintaba, me ponía a cantar, a actuar… desarrollé muchos talentos”, explicó. También recordó algunos momentos especiales con su madre, como cuando le permitió usar rímel y brasier por primera vez, un hito importante en su adolescencia.
Con el paso del tiempo, Sylvia Pasquel comprendió las razones detrás del comportamiento de Silvia Pinal, entendiendo que la dedicación de su madre al arte había sido lo que proporcionó a la familia una vida sin carencias materiales. A diferencia de su propia experiencia, Pasquel decidió no repetir la misma historia con su hija, Stephanie Salas, llevándola consigo a sus compromisos laborales en lugar de dejarla al cuidado de una niñera.
A pesar de las dificultades que marcaron su relación, Sylvia Pasquel ha aprendido a valorar el legado artístico de su madre y, con el tiempo, ha buscado forjar su propio camino en la industria del entretenimiento.